"Educación inclusiva" o La verdadera inclusión se respeta
Una escuela que es municipal y es dirigida por el Municipio debería tener, todos los documentos de los alumnos en orden, en su carpeta para poder ante cualquier novedad consultar y atender directamente el asunto que necesite solución.
No es posible que documentos ya pedidos para que el alumno que ingresa por primera vez sea vuelto a pedir otra vez, eso quiere decir que no hay una verdadera organización tanto de la Dirección, el Coordinador, por último la Secretaría General, no piensa que todos esos documentos tienen tiempo, valor, costo (incluido transporte para obtener todos y cada uno de los documentos solicitados con sus certificados por médicos tratantes de la especialidad como oftalmólogo). Tanto el médico, a veces, se pone con muchos requisitos para poder emitir el simple diagnóstico de ese alumno, y a parte, el costo también de sacar copias de las planillas de servicios básicos para confirmar la dirección de residencia, las copias del carné de discapacidad sea del Ministerio de Salud Pública, del Conadis, las palabras PERSONA CON DISCAPACIDAD en la cédula de ciudadanía o la total falta de carné de discapacidad, además de las fotos tamaño carné que se piden para múltiples trámites en nuestro país, son personas de bajos recursos económicos que no pueden moverse de un día para otro a hacer todos los trámites y gestiones correspondientes, tienen que usar transporte público dentro de sus posibilidades de movilidad de acuerdo a su tipo de discapacidad, pedirle ayuda a amigos, familiares o vecinos, para poder cumplir con todos los requisitos ya cumplidos cuando ingresó por primera vez a la institución. Pienso que si hubiera un poco más de organización, se pudiera evitar el gasto y la ida por gusto al centro educativo a perder el tiempo porque esa persona ya está inscrita y ya está matriculada.
Eso quiere decir que el pobre estudiante gastó por gusto más de US$8.00, por ejemplo, en una serie de documentos que ese estudiante ya los tiene ingresados en la Secretaría General hace tiempo.
No es culpa de las dos diferentes Direcciones Municipales que han tenido a su cargo, en distintos momentos, a esa escuela para ciegos ahora Centro Municipal de Apoyo para Personas con Discapacidad Visual, porque lo que desde hace aproximadamente 20 años es exclusiva responsabilidad de personal inepto e indolente tanto en la Dirección como en una o varias de las Coordinaciones de Sección. De los dos años que llevo como estudiante de la sección Rehabilitación de dicho centro han pasado por la Coordinación dos personas excelentes y tres de regulares a pésimas, es decir 5 coordinadores de sección en tan solo 2 años; mientras en las otras dos secciones del Centro ha habido relativa normalidad, por ejemplo en Escolaridad han habido tres coordinadores en los mismos dos años. A pesar de las grandes diferencias entre el Centro que describo y la también municipal escuela para sordos, siempre con balance positivo la segunda, al parecer el personal que se equivoca o comete faltas graves en la escuela para sordos es transferido como castigo al Centro Municipal de Apoyo para Personas con Discapacidad Visual, con la esperanza de fastidiarlo o agotarlo hasta que renuncie voluntariamente.
Es así que la segunda escuela es el cuco porque a unos docentes y personal administrativo educativo ya hartos se los expone a una especie de tortura, en el ambiente tóxico del Centro, para hartarlos aún más como si estuviésemos viviendo en la época de la dictadura de Don Gabriel García Moreno, entre enero y mayo de 1869.
Comentarios
Publicar un comentario